La cercanía del verano debe llevarnos a impermeabilizar nuestras piscinas como medida preventiva para mitigar el derroche de agua en tiempos de sequía. Una acción temprana puede traducirse en un ahorro de hasta 500 litros de agua diarios, que equivale al consumo promedio diario de una familia de cuatro personas.
La exposición prolongada a factores como la intemperie, el cloro para el tratamiento del agua, los productos químicos para su mantenimiento y el propio paso del tiempo, contribuyen al deterioro inevitable de la impermeabilización de las piscinas. Es importante, por tanto, realizar una evaluación periódica de esta infraestructura, especialmente ante la posibilidad de fugas, las cuales, en el caso de una piscina de tipo unifamiliar con dimensiones estándar (6×4 metros y 2 metros de profundidad) podrían ocasionar el vaciado completo del vaso en tan sólo un mes.
Entre abril y mayo es el momento oportuno para llevar a cabo labores de rehabilitación y determinar qué elementos requieren atención prioritaria como las juntas cementosas, cuya revisión y mantenimiento se recomienda realizar cada 2 a 5 años.
Además debemos de anticiparnos y tener en cuenta que el tiempo medio para una rehabilitación integral, que incluya la impermeabilización del vaso de la piscina, oscila entre dos semanas y 1 mes. Solo con esta acción conseguiremos prolongar su vida útil hasta 10 años sin necesidad de intervenciones adicionales.
Propamsa es una de las empresas líder que trabaja en soluciones de impermeabilización fáciles y rápidas que permiten disfrutar de una piscina ahorrando agua, tiempo y costes. Como innovador, el sistema PROPAM STOP WATER POOL TILE que incluye morteros de alta calidad y adherencia para la reparación no estructural del hormigón bajo ambientes agresivos como el PROPAM® REPAR TECHNO 20.
También el mortero PROPAM® IMPE FLEX permite una impermeabilización revestida con cualquier material, como la malla de fibra de vidrio resistente a los álcalis #BETOFIBER GLASS. O el PAM® ECOGEL FLEX como adhesivo cementoso flexible para la colocación de todo tipo de baldosas de cerámica como el #GRESITE, uno de los acabados más empleados en piscinas, incluso de gran formato, absorbentes y no absorbentes, en paredes y suelos interiores y exteriores.
Para optimizar la durabilidad y resistencia de estas soluciones de sellado, se recomienda el uso de productos de gran trabajabilidad como el BORADA® CHROMA y el BORADA® EPOLUXE. El primero especialmente formulado con cementos especiales, áridos de granulometría seleccionada y el segundo a base de arenas silíceas seleccionadas, aditivos especiales y resinas reactivas, que se endurece por reacción química sin pérdida de volumen, y puede utilizarse como adhesivo en piscinas con tratamientos especialmente agresivos de limpieza, indispensable su uso en piscinas de cloración salina.