La seguridad en el trabajo es una prioridad absoluta en todo el mundo, y en España lo tenemos claro. Por eso, en los últimos años se han promulgado toda clase de medidas para proteger a los trabajadores, especialmente en los sectores más vulnerables.
Los guantes de protección laboral son uno de los elementos más importantes y esenciales para mantener seguras las manos de los profesionales en todo tipo de industrias. Pero,sigue habiendo una duda: ¿es obligatorio llevar guantes o no? Y, si es obligatorio, ¿qué profesionales tienen que cumplir con esta norma? Hoy respondemos a estas preguntas.
La normativa declarada por el Gobierno de España, en este sentido, se basa en la seguridad y salud en el trabajo. Así, la Ley de Prevención de Riesgos Laborales española obliga a los empresarios a evaluar los riesgos relacionados con el desempeño de una actividad, así como a proporcionar Equipos de Protección Individual (EPIs), como guantes de trabajo cuando sea necesario.
Dicho de otro modo, la regulación establece que los guantes de trabajo son obligatorios en aquellos sectores donde pueden ocurrir accidentes laborales relacionados con las manos, como por ejemplo la actividad industrial o la de gremios como carpinteros, electricistas o forestales o muchos otros puestos en los que es necesario manipular, por ejemplo, objetos punzantes.
Más allá de estos ámbitos, la legislación obliga a los responsables a identificar todos los peligros y garantizar que esos profesionales dispongan de Equipos de Protección Individual (EPIs) adecuados para evitar lesiones.
Pero, los guantes de trabajo no son sólo un requisito legal, sino un importante elemento de prevención que evita muchos accidentes. Estos elementos protegen las manos de los trabajadores de cortes y abrasiones, de quemaduras químicas, de bajas temperaturas, calor y de heridas punzantes.
Y, más allá de la protección física, también nos encontramos con la parte psicológica que rodea a todo este equipo de protección, y que no debe subestimarse. Los empleados tendrán más confianza y se centrarán más en su trabajo cuando sepan que se cuida su salud y, como resultado, mejorarán su rendimiento laboral.
Es importante elegir los guantes de trabajo adecuados para que puedas obtener todos los beneficios de protección.
También debes ser consciente de los peligros específicos vinculados a cada tarea laboral, para poder elegir los guantes en consecuencia.
Por ejemplo, en algunos casos (como cuando se trata con objetos afilados) es necesario llevar guantes resistentes a los cortes. Y los guantes resistentes a ciertos tipos de sustancias son útiles para quienes manipulan productos químicos.
El ajuste y la comodidad también son consideraciones importantes a la hora de elegir unos guantes de protección. Así, un par demasiado ajustado puede limitar el movimiento, y unos guantes demasiado holgados pueden dejar al usuario vulnerable a las lesiones. Por eso, los trabajadores deben probarse tallas más grandes y más pequeñas para encontrar las que mejor se ajusten a las dimensiones de sus manos.
Por último, piensa en los materiales y en la duración de los guantes. En función del sector, los guantes deben soportar materiales abrasivos o cortantes, un uso frecuente, etc., . Unos guantes bien hechos y duraderos pueden conllevar una inversión más alta, , pero compensan a largo plazo, ya que duran más y evitan lesiones que pueden ocasionar otros gastos con el tiempo. Además, los productos más duraderos son más sostenibles, por lo que evitaremos desechos de materiales que durarán años sobre la tierra.
Los guantes de trabajo tienen una gran importancia para el ámbito de la prevención y la seguridad en general.