Para REKKER, la cocina es el corazón del hogar, y cuando se viste de blanco, adquiere una nueva dimensión. Este proyecto, desarrollado con el modelo REKTO sin tiradores es la perfecta combinación de diseño contemporáneo, estilo y tecnología avanzada.
Concebida para familias numerosas, la disposición se ha planificado para soportar un uso intensivo y garantizar la circulación eficiente. La elección del color blanco no solo responde a una tendencia estética, sino que constituye una solución atemporal que mejora la percepción lumínica y amplía visualmente el espacio.
En REKKER, las cocinas blancas son valoradas por su capacidad para crear ambientes serenos y amplios. Esta paleta cromática se complementa con detalles en madera natural que aportan calidez y textura y la convierten en un espacio que trasciende su función culinaria.
La cocina ha sido diseñada con una distribución en forma de L que favorece la eficiencia en las distintas áreas de trabajo y permite diferenciar claramente las zonas de almacenamiento, preparación y cocción, facilitando el uso simultáneo por varias personas.
En el núcleo se sitúa una amplia isla central, concebida como el eje funcional y social del proyecto. Sobre la encimera de MDi de la firma INALCO, en acabado Larsen hay tres quemadores de gas de alto rendimiento PITT Cooking en hierro fundido que garantizan la distribución uniforme del calor. Cuenta con un sistema Falmec de extracción oculto en la estructura para la
eficaz eliminación de humos y olores.
La isla central incorpora soluciones de guardado que optimizan el espacio, además de contar con una mesa que amplía su uso, siendo un lugar ideal para la socialización y el encuentro familiar.
Como pieza complementaria encontramos el rincón de desayunos equipado con el sistema de puertas escamoteables Revego, el cual permite ocultar completamente este espacio auxiliar cuando no está en uso, favoreciendo la continuidad y la limpieza formal del conjunto.
El módulo desayunador presenta paredes revestidas en madera natural y una encimera de MDi que confiere resistencia y coherencia con el resto del mobiliario.
En su interior, se ha dispuesto un cajón inferior, junto con dos bandejas extraíbles en la parte baja, pensadas específicamente para almacenar pequeños electrodomésticos de uso cotidiano, optimizando así el aprovechamiento del espacio y facilitando su accesibilidad.
En la pared posterior de la zona de aguas encontramos una estantería decorativa a dos niveles, cuya estructura está revestida en madera natural. Este elemento introduce un contraste cromático que aporta calidez y rompe intencionadamente con la monocromía predominante en blanco. Es una pieza abierta pensada tanto para albergar elementos funcionales como objetos
decorativos.
En materia de almacenamiento, se han instalado módulos despenseros verticales de gran capacidad, para maximizar el espacio en altura sin comprometer la disponibilidad. Estos armarios en columna, integrados de forma continua con el resto del mobiliario, cuentan con frentes lisos y sistema de apertura push, eliminando tiradores visibles y contribuyendo a una imagen depurada.
Como complemento, hay un enfriador de copas compacto y elegante, colocado de forma encastrada para conservar las copas a la temperatura óptima de servicio.
La iluminación de la cocina ha sido cuidadosamente elegida para adaptarse a las distintas actividades del espacio. Como elemento principal, se han colocado dos lámparas colgantes modelo Hat, de la prestigiosa firma Beneito Faure, situadas sobre la parte de la isla que funciona como mesa.
Estas luminarias LED, de instalación empotrada, con diseño tipo platillo y potencia de 8W se presentan en suspensión mediante un sistema de cable retráctil que permite ajustar la altura entre 120 mm y 1.500 mm, adaptando la luz a necesidades puntuales según el uso.
Esta cocina no solo llama la atención por su funcionalidad avanzada, sino también por su capacidad de convertirse en un espacio para vivir, compartir y disfrutar de la belleza de lo esencial.
ACERCA DE REKKER
Rekker cuenta con más de 30 años de experiencia en el diseño y fabricación de muebles de cocina y se siguen considerando artesanos. A lo largo de estas tres décadas de historia, han conseguido desarrollar un estilo propio, creando un producto técnico, personalizable y de calidad.
Desde los inicios hasta la actualidad, han experimentado una gran evolución dotando a la fábrica, ubicada en Bigues i Riells (Barcelona), de unas instalaciones modernas y equipadas con la última tecnología en maquinaria.
Cuentan con un equipo multidisciplinar altamente especializado que combina procesos automatizados con acabados manuales que aportan un toque final único a los productos.
Son conscientes del elevado grado de exigencia del mercado y por ello su filosofía se basa en reinventar y desarrollar un nuevo concepto de cocina. Calidad, durabilidad, funcionalidad y diseño dan respuesta a las expectativas más exigentes de los clientes para cubrir las necesidades de trabajo, almacenamiento, organización y optimización del espacio.