En los últimos años, hemos presenciado una transformación notable en el sector de la rehabilitación y renovación de edificios. En el número anterior, veíamos la importancia de mejorar la eficiencia energética de las estructuras. Otro componente crucial de esta evolución ha sido la integración de las energías renovables, con especial énfasis en las placas solares. Este avance no solo está remodelando el paisaje urbano,
sino también redefiniendo nuestra relación con la energía y el medio ambiente. Las placas solares se presentan como una respuesta necesaria
y urgente ante los desafíos medioambientales y energéticos globales. La dependencia de los combustibles fósiles no solo afecta a la crisis climática, sino que también ha demostrado ser insostenible a largo plazo. Por ello, en este contexto, energías renovables como las
placas solares representan una alternativa viable y eficiente. Estas tecnologías reduce la huella de carbonos, a la vez que ofrecen una fuente de energía limpia y renovable.
La innovación tecnológica sigue avanzando, haciendo que las placas solares sean cada vez más demandadas y accesibles. La conciencia social y las regulaciones están impulsando a considerar esta alternativa como una parte integral de los proyectos.